En un acto sencillo pero significativo, que tuvo lugar en la Parque Santander, fue conmemorado el Día Nacional de la Memoria y Solidaridad con las Víctimas, tal como fue establecido en el artículo 142 de la Ley 1448 de 2011.
La jornada comenzó con la intervención musical de la Escuela de Bellas Artes y Humanidades de Sucre, el performance «Vida», de Tatiana Narváez, y los Cantores de Paz, de la fundación Conservatorio de Música. El homenaje cerró con el acto simbólico «Árbol de huellas», que fue firmado por los asistentes.
«Desde la Administración, con este pequeño homenaje, queremos decirles que estamos con ellos, que tenemos un proyecto de víctimas que busca auxiliarlos, precisamente porque son personas que han sido golpeadas por todo este tema», indicó Luis Fernando Arroyo, secretario del Interior.
El jefe de esta dependencia reiteró que lo que se busca es no seguir revictimizándolos. «En este proyecto buscamos darles ayudas inmediatas y transitorias para que puedan sentirse conformes con toda esta desafortunada situación que vivimos», dijo.
Angél José Redondo, oriundo de El Salado, Bolívar, llegó desplazado por la violencia hace más de 10 años y encontró en Sucre la forma de levantarse de nuevo, lo que permitió descubrir un talento para la pintura y poder expresar a través de estas lo que sintió y vivió.
«De una manera muy bonita, tierna y guiada por Dios quisimos, en compañía de la Fundación Franciscana Tomás Moro, con el colectivo artístico reconstruir la memoria histórica a través del arte visible, pues a mi pueblo ya se le habían hecho poesía, libros y canciones», añadió.
Aseguró que hoy es un día muy especial, pues se conjugan muchos sentimientos, entre ellos la alegría, la nostalgia, el dolor, el amor, la paciencia y la tolerancia. «Hay que saber perdonar para poder vivir convenidamente con lo que Dios demanda en nuestras vidas. Hicimos estas preciosas obras que relatan el antes del pueblo, el durante y el después de la masacre».
José Luis Padrón, director de Prosperidad Social Sucre, indicó que con este acto sociocultural se busca trascender de la queja y la lamentación y más bien pensar en cómo a través del Estado se les oferta a esta población alternativas «que posibiliten acabar con las limitaciones, precariedades, privaciones y carencias. En ese sentido, toda la oferta del Estado se armonice en favor de estas familias y logren romper esas trampas de pobreza».
También estuvieron presentes miembros de la Alcaldía de Sincelejo, Gobernación de Sucre, Policía Nacional, Armada Nacional, Defensoría Regional, Cecar, Sena y la Unidad para las Víctimas, entre otros.