El sorpresivo anuncio del alcalde de Sincelejo de no prorrogar el contrato de operación del acueducto y alcantarillado a la empresa Veolia, alcanzó a ilusionar con que al fin el mandatario tuviera una decisión acertada y en favor de la ciudadanía, pero la felicidad fue corta, no hay que ser experto en contratación para darse cuenta que los pliegos de condiciones del “ proceso de selección “ están diseñados para que solo una empresa cumpla los requisitos y se gane el contrato por VEINTE ( 20 ) años, en pocas palabras ¡ Veolia NO se va !.
Cualquier empresa seria que quisiera ofertar necesitaría un tiempo prudente para realizar el análisis técnico y financiero, recaudar información sobre la situación real del acuífero de Morroa y proyectar la tasa de retorno respecto a la inversión exigida, pero la premura de los tiempos establecidos lo impide, allí está la clave y por eso la procuraduría pidió una extensión de DIEZ ( 10 ) días, esto, sumado a la inestabilidad administrativa y política que genera la inminente salida de Andrés Gómez de su cargo, hacen poco atractivo el “ proceso de selección “.
Blanco es, frito se come y la gallina lo pone, después de VEINTE ( 20 ) años de operaciones, solo Veolia tiene la información y los estudios necesarios para presentar una oferta y todo indica que será la única.
Pero….
¿ Por que simplemente no prorrogan el contrato si el objetivo es dejar a Veolia ?
Por que la ley limita el tiempo de la prórroga, mientras que con un nuevo contrato Veolia se quedaría por VEINTE ( 20 ) años más.
Fiel a lo que ha sido su administración, Andrés Gómez le regaló a Sincelejo en su cumpleaños un “ paquete Chileno “, y según se rumora, tuvo DIEZ MIL MILLONES ( 10.000.000.000 ) de razones para hacerlo.
